¿Qué es una tendinopatía?

Para comprender que es una tendinopatía, primero vamos a explicar que es un tendón, como es, y para que sirve.

Los tendones son bandas de tejido conectivo que están compuestos por un conjunto de fibras principalmente de colágeno tipo 1, estas fibras de colágeno están envueltas en una capa de tejido conectivo llamado peritendón, además, algunos tendones van envueltos en otra capa más, llamada vaina sinovial.

Los tendones van unidos por un lado al musculo, formando la denominada unión miotendinosa, y por el otro, se unen al hueso, denominando a esta unión entesis.

Su función es la de transmitir la fuerza generada por el musculo para dar movimiento a las articulaciones.

Dicho esto, vamos a ver que es una tendinopatia y sus fases:

La tendinopatia es un concepto que engloba las lesiones del tendón y las estructuras que lo rodean. Podemos decir que las tendinopatías son lo que antes mal denominábamos tendinitis, ya que el término tendinitis sugiere inflamación y realmente pocas veces existe ese proceso inflamatorio y cuando existe, ésta se suele producir en las estructuras que envuelven al tendón, y no en el propio tendón.

Lo que realmente se produce en las tendinopatías, son cambios en las fibras de colágeno que llevan al tendón a un proceso progresivo de degeneración.

¿Porque se producen las tendinopatías?

Las tendinopatías se producen por sobreuso, es decir, cuando el tendón recibe más carga de trabajo del que está acostumbrado. Además, entre otras cosas tiene relación con la edad, enfermedades metabólicas, los gestos repetitivos, ya sea en el trabajo o practicando algún deporte, con deportistas que aumentan repentinamente la intensidad de los entrenamientos, mala ejecución en la técnica deportiva etc…

La clave para entender las lesiones tendinosas reside en que es un tejido pobre en células y vascularización, lo que hace que el metabolismo del tendón sea mucho más lento en comparación con otros tejidos como músculos, ligamentos, fascias etc… Esto hace que el tejido tendinoso tarde mucho más tiempo en repararse y adaptarse a las nuevas demandas, lo que provoca que se inicie el proceso patológico sino se hace nada al respecto.

Este proceso patológico se divide en 3 fases:

• Fase reactiva: cuando el tendón es sometido a una carga excesiva, él mismo intenta adaptarse engrosando la matriz del tendón para aumentar su superficie y reducir la carga recibida. Digamos que en esta fase el tendón nos está avisando, o hacemos algo al respecto o iniciara un proceso degenerativo más importante.
• Fase de degeneración o reparación fallida: Esta fase es la progresión de la reactiva, no hemos escuchado los avisos del tendón, no hemos controlado la carga y éste al no poder adaptarse por si solo, progresa en el proceso de descomposición celular, de degeneración. En esta fase llegamos tarde, pero estamos a tiempo de solventar el problema.
• Fase de tendinopatía degenerativa: La descomposición celular es enorme, el tendón está totalmente degenerado. Francamente las posibilidades de solventar el problema no son muchas, pero sino se intenta el tendón terminará rompiéndose.

Síntomas

Entre los síntomas que generalmente presentan las tendinopatías nos encontramos;

– Dolor generalmente localizado a punta de dedo en la zona central o insercional del tendón que aumenta al sobre solicitar el tendón y se atenúa con el reposo.

– Rigidez en la zona afectada, sobretodo matutino y que cede a medida que vamos movilizándolo suavemente.

– Engrosamiento del espesor del tendón.

– Debilidad o incapacidad al movilizar la articulación.

– Pueden aparecer nódulos o bultos en el tendón, sobre todo en los estadíos más avanzados

TRATAMIENTO

En cualquier estadio de las tendinopatías el tratamiento inicial es conservador, es decir, fisioterapia. Y si éste fracasa, el traumatólogo probablemente optará por la cirugía.

• En cuanto al tratamiento conservador, la principal herramienta que tenemos, la que mayor evidencia científica tiene en esta patología, es el ejercicio físico controlado.

Además, los fisioterapeutas contamos con infinidad de técnicas, terapia manual, punción seca, epi, fibrólisis diacutanea, vendajes, electroterapia etc… Estas herramientas están muy bien y van a ayudar a reducir la sintomatología, pero ninguna de ellas va a ser realmente efectiva sino se complementa el tratamiento con el ejercicio terapéutico controlado.

Es importante recalcar, que esta patología es más compleja de lo que parece, y aunque el tratamiento vaya por el buen camino, los resultados no son rápidos, especialmente en los estadios más avanzados.

En conclusión, cuando tenemos dolor en un tendón, es una señal de alarma, éste nos está avisando de que le estamos dando más trabajo del que está preparado para hacer y sino adaptamos la carga de trabajo y lo preparamos para las nuevas cargas, empezará un proceso degenerativo que puede tener un final no deseado.

Por lo que desde la clínica Omnia te recomendamos que si tienes dolor tendinoso, aunque sea soportable, no lo dejes pasar y consultes con tu fisioterapeuta en Valencia de confianza.